Más historias

A una escala menor, más circunscrita a Caspe, que está de grandes fiestas, y a algunos foros culturales capitalinos, pero se ha organizado, aunque tarde bien el VI Centenario del Compromiso de Caspe, un hecho singularísimo, modelo de discusión sobre algo tan trascendente entonces como la sucesión de un monarca sin sucesión directa. Algo de enorme trascendencia en la Corona de Aragón. Y en España toda. Los veteranísimos congresos de Edad Media en la Corona de Aragón han fijado para esta ocasión reunirse en tierras aragonesas, bajo la mano maestra de Isabel Falcón. Se ha remozado la Colegiata (estudiada por Gonzalo Borrás, Teresa Thompson y otros), se han editado libros, celebrado reuniones y, ahí va esa muestra, estudiado cuanto tiene que ver con la efemérides. El estudio sobre el gran cuadro de Marín Bagüés corre a cargo de Guillermo Fatás, Blanca Ferrer y Manuel García Guatas, tres expertos. Enhorabuenas.

Sigue la preciosa serie de desplegables históricos, bien realizada y magníficamente diseñada por Francisco Meléndez. Esta nueva entrega de la IFC estudia al gran Zurita.

Excelente es el libro de Francisco Ramiro Moya, Mujeres y trabajo en la Zaragoza del siglo XVIII, resumen de su tesis doctoral muy ameno e interesante, excelentemente documentado, publicado por las Prensas Universitarias (PUZ). No es raro, pero sí infrecuente el caso de varones trabajando en estos temas, sumando su esfuerzo al de un grupo de muy meritorias mujeres: el autor recuerda y agradece su labor y ayuda a María Victoria López-Cordón, Ofelia Rey, Isabel Morant, y nuestras Carmen García Herrero y Encarna Jarque. Además, es un buen enfoque metodológico de las emergentes historias del trabajo.

Nuestro tan querido amigo y magnífico historiador ha “editado” con pulcritud y maestría las Memorias del Mariscal Suchet sobre sus campañas en España, 1808-1814 (Institución Fernando el Católico, 2012, nº 8 de la colección Historiadores de Aragón). Todo son aciertos. La elección del texto, clave en la historia de la Guerra de la Independencia en el Este, revisión de la mejor traducción, la cuidadísima edición, la impresión y diseño. Unas memorias muy entretenidas, de un alto cargo napoleónico que estuvo todo el tiempo en España y tenía un agudo sentido del análisis político, militar, social y cultural. Más que recomendable.

Evocando inevitablemente el estudio de Borrás y Fatás sobre el plano de Wyngaerde, con el mismo formato y mejorando lo posible el diseño, con aportaciones gráficas y literarias de calidad, Carlos Forcadell, Álvaro Capalvo,  Pilar Lop y J.M. Lanzarote ofrecen en Zaragoza en 1861 (IFC) una “lectura” técnica, interpretativa, cirenea, del plano de José Yarza. Una pequeña joya.