Dos libros de poesía
El maestro Fernando Ferreró (con Rosendo Tello y Emilio Gastón los tres grandes decanos de la poesía aragonesa actual), ofrece de su larga y elegante depuración poética, vital, Memoria, editado por las PUZ. Revisión de una vida reflexiva, intimista, conceptista, el poeta ve cómo “el tiempo se acomoda/bajo luces tranquilas”, aunque en otro lugar percibe cómo “incierta se remueve/la curva del destino”. Se encuentra envejecido y que “rastreando las fechas/obtengo la razón/de mi fracaso”. No en poesía, querido amigo, no en poesía.
Y el jovenzano que acaba, felicidades, de llegar a los setenta, Miguel Ángel Yusta, antologiza 20+1 Poemas, seleccionados de los once libros publicados en los últimos quince años. Como prologa con acierto Ángel Guinda, en él “conviven la magistral intuición comunicativa del poeta popular y el talento expresivo del poeta culto”. Un pulcra edición (¡bilingüe en castellano y gallego!) de la editorial toledana Lastura, recoge de sus viejas carpetas y vivencias, bien sean de su querido París, en cuya cloaca es sólo redimida “por miles de poetas impertinentes”, y cuyos camareros de Montparnasse “ya saben que el mundo está allí, y lo administran sabiamente”. O bien, recuerdos de “cualquier calle de barrio de cualquiera ciudad,/España, años cuarenta del siglo de las guerras”. Y sigue vivo, porque “la poesía se derrama/en las luces de cada amanecer”.