Presentación del primer número de Andalán en L’Aínsa

Un sábado por la mañana, para poder reunir a mucha gente. Día, el 16 de septiembre de 1972 y la localidad, l’Aínsa. Allí se presenta el primer número del quincenal Andalán. Coincidía con las fiestas del pueblo cuya elección no fue casual: evocaba los orígenes aragoneses y la recuperación de la fabla, el folclore, la historia y el arte que había llevado a cabo con tesón Ánchel Conte. Se dejaba al lado, para uso real, San Juan de la Peña; se subía desde Zaragoza, demasiado capitalina. Aínsa, como símbolo de un Aragón más complejo, era la villa que se había convertido en la más conocida por su nueva manera de organizar comunalmente el urbanismo, la educación y el patrimonio.

Eloy Fernández Clemente en L’Ainsa, septiembre de 1972

El acto, realizado en la plaza a mitad de mañana, comenzó con unas palabras del director de la revista, Eloy Fernández Clemente. El periódico recién nacido es, según su discurso, un gran tablero de ajedrez que se ocupa de “crear cultura y fomentar la conciencia regional”. Aragón tiene que encontrar su ser más auténtico para lo que, de un lado, debe huir del secular centralismo y la vitalidad que presentan las regiones vecinas; y, de otro, de una serie de tópicos que lo desfiguran a través de una folclorización confusa. Se trata de hacer Aragón desde la “verdad, la libertad y la justicia”. (Acompañamos este texto del audio del acto que grabó uno de los asistentes, Herminio Lafoz).

Los mozos y mozas de l’Aínsa bailaron con sus hermosos atuendos y presididos por la enseña olvidada de los cuatro palos de gules, al son de pandero y acordeón. La Hermandad Pictórica (los hermanos P. Rodrigo) hace coincidir este acto con la presentación de su primera exposición. Palabras, arte y folclore a los que se sumaron las canciones. Primero, la melodiosa voz de Mª Pilar Garzón, “De qué nos tién que fablar?” ; después, José Antonio Labordeta, el “Aragón” del ‘polvo, niebla y sol’, “Las palabras”, para cantar, para reír, para llorar, para vivir, para gritar, para morir, “Las arcillas” y “La razón de la fuerza” que con Andalán se deseaba verla sometida a la fuerza de la razón.

Reproducimos un audio de la jornada: DARA. Fundación Bernardo Aladrén. Producción Herminio Lafoz, 15-9-1972.