“Busqué en la almohada el olor a sal de los cabellos de María” ( Albert Camus)
En la calle san Elías de Barcelona encontré tirados en el suelo y cerca de un contenedor unos cuantos libros. Entre ellos La Peste de Albert Camus, encuadernado por un plástico doméstico. Sequé sus tapas húmedas porque la mañana de domingo apareció lluviosa.
El libro había sido , querido y estudiado. Algunas líneas estaban remarcadas en amarillo. Era una buena selección de la delicada prosa de Camus :
“El paso de las nubes había dejado una promesa de lluvia en las calles que la volvía mas sombría”…
“Era agradable sentir derramarse la noche de verano sobre nuestros cuerpos morenos”…
“ Por la puerta abierta entraba el aroma de las flores y de la noche”…
“El sol había hecho estallar el alquitrán”…
Había unas líneas enmarcadas con fuerza y con rotulador rojo:
“BUSQUÉ EN LA ALMOHADA EL OLOR A SAL QUE HABÍAN DEJADO LOS CABELLOS DE MARÍA”