William Morris
En este artículo nos acercamos a la visión socialista española sobre William Morris, un personaje fundamental en la historia de la izquierda británica decimonónica. Para ello nos basaremos en el homenaje que El Socialista le brindó a raíz de su fallecimiento en 1896.
En los números 554 y 555 del órgano del Partido Socialista se incluyeron dos artículos sobre su figura. Estos artículos tienen su importancia porque interpretan algunos de los aspectos más relevantes de su compromiso socialista.
En el primero de los trabajos, con un claro afán pedagógico, propio de la publicación, se explicaba la llegada de Morris al socialismo. En el texto se nos informaba que hasta fines de la década de los setenta no era más que un radical. En una conferencia o discurso que impartió el 14 de noviembre de 1884 en Oxford realizó una intensa crítica del “régimen burgués”, y se declaró como socialista, manifestando el propósito de luchar por el triunfo de “la clase explotada”. En el artículo se destacaba este discurso por haberse realizado en una institución especialmente conservadora.
Morris había fundado la Liga Socialista, desde donde se empeñó en la causa socialista. Además, había creado The Commonwealth, donde publicó numerosos artículos. También fue importante su campaña a través de discursos y mítines.
El artículo terminaba aludiendo a uno de los libros de Morris, destacando la idea de que solamente una sociedad colectivista haría que el trabajo dejara de ser abrumador por estar repartido. El trabajo ya no sería un oficio para convertirse en ocupación, en arte, aludiendo, sin lugar a dudas a lo que hemos calificado en otro momento de socialismo estético. El arte solamente podría emanciparse en una sociedad sin clases.
En el siguiente artículo se incluía un texto remitido por el corresponsal de El Socialista en Londres para dar a conocer al lector la importancia de Morris. El artículo abordaba la biografía de nuestro protagonista, resaltando los puntos que le vinculaban con el compromiso socialista. Destacaba su estancia como estudiante en Oxford, donde comenzó a publicar sus poemas. Morris era miembro de una familia muy acomodada, pero en el momento en el que conoció las ideas socialistas se dedicó a la causa. Al parecer, comenzó a llegar al socialismo con la lectura de Stuart Mill en su defensa del capitalismo. Aunque en el artículo anterior se aludía al discurso de Oxford por su importancia en su paso hacia el socialismo, en realidad, cuatro años antes había llegado al mismo, con su ingreso en la Federación de la Democracia Social. Después se relataba lo que ya sabemos de su compromiso. En 1885, la organización se dividió. Morris, Aveling, E. Marx y otros se separaron y fundaron la Liga Socialista, pero terminarían por salirse por su deriva anarquista. En todo caso, Morris se había destacado por mantener buenas relaciones con sus compañeros.
Al parecer, en los últimos años de su vida se había comprometido para intentar unir las distintas facciones socialistas en Inglaterra, pero los problemas de salud le impidieron trabajar más intensamente. Es interesante comentar, como el corresponsal preveía que este sueño de Morris se iba a cumplir muy pronto. Pero aún se tardaría un poco en que se fundara el Partido Laborista.