Aniversarios musicales: Leonard Bernstein (1918-1990)
El 25 de agosto se cumplen los cien años del nacimiento de Leonard Bernstein, pianista, compositor y director de orquesta, que desarrolló una actividad musical incansable y logró una gran proyección internacional, así como conectar con un público muy amplio y hacer populares algunas de sus composiciones. Su obra como compositor y su legado como director de orquesta merecen recuerdo y admiración al conmemorar el centenario de su nacimiento.
Algunos datos biográficos
Leonard Bernstein nació en Lawrence, Massachusetts, el 25 de agosto de 1918, en una familia de origen ruso-judío, tradición judía que se reflejará en algunas de sus obras. En 1935 se graduó en la Boston Latin School, en 1939 en la Universidad de Harvard y en 1941 en el Curtis Institute of Music de Filadelfia.
Bernstein fue nombrado director asistente de la Filarmónica de Nueva York en 1943; de 1945 a 1948 dirigió la Sinfónica de Nueva York, y de 1958 a 1969 fue director musical de la Filarmónica de Nueva York. Viajero incansable, llegó a dirigir como director invitado hasta setenta orquestas, algunas veces actuando también como pianista solista, destacando entre ellas la ya citada Filarmónica de Nueva York, la Sinfónica de Boston, la Filarmónica de Israel y la Filarmónica de Viena. Tenía especial aprecio a dirigir obras de Haydn, Beethoven, Brahms, Schumann y Mahler, incluyendo también en sus programas numerosas obras contemporáneas.
Convencido de la importancia de divulgar y extender la afición a la música clásica, Bernstein abrió al público los ensayos de sus conciertos y cuidó su emisión por televisión. Especial interés despertó la serie de 53 “Conciertos para jóvenes”, de 1958 a 1972, en los que hizo de guionista, comentarista, pianista y director. Un bello libro, “El maestro invita a un concierto” (Siruela, 2002), recoge el guión de quince de ellos con ilustraciones musicales.
También dirigió numerosas óperas. En 1953 debutó en La Scala de Milán, con María Callas, en “Medea”, de Cherubini. En 1966 lo hizo en la Ópera de Viena, con “Falstaff”, de Verdi.
A lo largo de su vida mostró una fuerte personalidad de judío neoyorquino, vinculado con la izquierda de su país. Casado y con tres hijos, era bisexual. Gran comunicador, conversador y extrovertido, sus músicos le llamaban familiarmente “Lenny”. En la dirección de orquesta su batuta era enérgica y la acompañaba con un lenguaje corporal muy gestual. Aunque apasionado por la música (“que puede dar nombre a la innombrable y comunicar lo desconocido”), quería abarcar también otros campos de actividad como la docencia o la poesía. Participó en acciones reivindicativas contra el apartheid en Suráfrica, en contra de la guerra de Vietnam o a favor de Amnistía Internacional.
Mantuvo su actividad como director hasta agosto de 1990, muriendo en Nueva York el 14 de octubre de 1990.
Compositor
Entre sus obras orquestales pueden destacarse tres sinfonías: nº 1, “Jeremiah” (1942); nº 2, “La edad de la ansiedad” (1949); nº 3, “Kaddish; Serenade, sobre Symposium de Platón (1954); Chichester Psalms” (1965); Mass, gran oratorio escénico (1971).
Para el teatro compuso diversos musicales, entre los que destacan “Fancy Free” (1944), “In the town” (1944) y “Candide” 1956, una deliciosa opereta inspirada por la obra de Voltaire. Su mayor éxito fue “West Side Story” (1957), una historia de amor en un ambiente de bandas rivales, por el lirismo y la belleza de sus melodías y la intensidad del ritmo de sus números orquestales y corales. Su fama se expandió por todo el mundo, tras su rodaje como película en 1961 por Robert Wise y Jerome Robbins, que obtuvo los oscars a la mejor película y a la mejor dirección en 1962.
Aun reconocido como gran compositor, Berstein sintió siempre una cierta frustración porque esta obra superara en su conocimiento y éxito popular a cualquiera otra de sus obras.
Grabaciones en discos y videos
Bernstein desarrolló una actividad incansable en los estudios de grabación sonora y audiovisual al frente de muy diversas orquestas. Se calcula grabó más de cuatrocientos discos. La ocasión que depara su centenario ha promovido la reedición de muchos de ellos por las distintas compañías discográficas. Entre ellas destaca la caja editada por Deustche Gramophon que incluye nada menos que 121 CDs más 36 DVDs.
Como recuerdo del maestro me atrevería a sugerir tres DVDs, que creo de especial interés: sobre la grabación en estudio de “West Side Story”, en 1985, bajo su apasionada dirección y contando con Kiri Te Kanawa, José Carreras y Tatiana Troyanos, que recoge con fidelidad todas las incidencias de la grabación (“The making of Wide Side Story”, Deutsche Gramophon). “Candide”, dirigiendo el Coro y la Orquesta Sinfónica de Londres, con Jerry Hadley, June Anderson y Christa Ludwig (DG, 1989). Y la Novena Sinfonía de Beethoven, interpretada bajo su dirección por una gran orquesta de músicos de muy diversos conjuntos, en diciembre de 1989, en la Schauspiel Haus de Berlín, unos días después de la caída del muro. En ese concierto, televisado a 20 países, Bernstein parafraseó el coro final, la “Oda a la Alegría”, sustituyendo la palabra “alegría” por “libertad” (“Ode to freedom”, Unitel classica)