07/01/2019

Turín (y III): la Mole Antonelliana, el Museo del Cinema y el Museo Egipcio

Junto a Palacios (Real, Madama, Carignano), Iglesias (San Lorenzo, Duomo, Consolata) y Galerías de arte (Sabauda, Agnelli) muy interesantes, Turín ofrece al viajero dos Museos especializados igualmente dignos de ser visitados. Se trata del Museo Egipcio y del Museo del Cinema, a los que dedicamos este comentario.

 

La Mole Antonelliana y el Museo del Cinema

La Mole Antonelliana es un edificio monumental, símbolo de la ciudad de Turín, que destaca en su horizonte. Construído en 1863, según proyecto de Alessandro Antonelli, inicialmente fue proyectado para ser el templo de la comunidad israelita. Destaca por su gran bóveda sobre la que se alza una elevada aguja, que hace que el edificio alcance los 167 metros de altura. Sobre el exterior de la cúpula resalta la instalación luminosa “el vuelo de los números”.

Cedido al Ayuntamiento de Turín, tras diversas incidencias y reparaciones, en 1961 se introdujo en el centro de su gran sala un ascensor panorámico elevado por cables, que permite tener una visión general del interior y alcanzar el mirador situado en la cumbre, desde donde se divisa una bella vista de la ciudad y, como fondo, los Alpes.

En 1996 se destinó el edificio a Museo Nacional del Cinema. Ofrece un completo recorrido por la historia del cine en un itinerario interactivo, así como de las diversas fases que preceden al acabado de una película, con instalaciones escenográficas, proyecciones, carteles, fotografías y objetos utilizados en los rodajes (vestuario, joyas, máscaras, e incluso, entre ellos, la capa de Superman, varios aliens o un tiburón), y bandas sonoras.

En la inmensa sala del Templo, estancia principal de la planta baja, los asistentes pueden acomodarse en cómodos sillones para asistir a las continuas proyecciones de fragmentos escogidos de películas famosas. Unas amplias rampas adosadas a las paredes del edificio, permiten acceder a las cuatro plantas superiores y contemplar objetos y proyecciones.

Para los estudiosos, el Museo reúne 30.000 films, representativos de las distintas épocas del cine. En su Archivo histórico se guardan miles de documentos relacionados con el séptimo arte (guiones, bocetos, fotografías, storyboards), así como 3.000 grabaciones de bandas sonoras.

 

 

El Museo Egipcio

Es el museo egipcio más antiguo del mundo, fundado en 1824. Está considerado como el más completo sobre esta materia, junto con el Museo de El Cairo. Como dijo Jean Francois Champolion, quien descifró la piedra de Rosetta, “el camino hacia Menfis y Tebas pasa por Turín”.

Situado en un palacio barroco en el centro de Turín  (Vía Accademia delle Scienze, 6), custodia una colección de 40.000 objetos, de los que alrededor de 3.300 están expuestos en sus salas.

Sus estatuas, papiros, sarcófagos y objetos de la vida cotidiana ofrecen al visitante un viaje en el tiempo a través de 4.000 años de historia, arte y arqueología.

La muestra se desarrolla en cuatro plantas, perfectamente organizadas, siguiendo las distintas épocas, desde el antiguo reino hasta la época romana. En ellas se suceden, junto a multitud de objetos de uso común (armas, pinturas, estatuillas, utensilios, cerámicas), monumentos de especial importancia: tumbas (Iti, Neferu, Kha), sarcófagos (como los de Khonsumore o Butehamon), restos de templos (como el de Ellesiya, donado por Egipto con motivo de la construcción de la presa de Asuan, o la capilla de la tumba de Maya). Destacan también las estatuas de faraones expuestas en la Galería de los Reyes (entre ellas, Ramsés II en el trono), relieves de Djoser, el lienzo pintado de Gebelein o el Canon real (papiro real de Turín), que contiene la lista de los faraones.