15/04/2010

La poesía es terapéutica

Michel Bernard

El amigo Michel Bernard pertenece a la Sociedad de Poesía Francesa, que ha cumplido 100 años de vida. Tiene la sede en la rue Monsieur le Prince de París, una calle que guarda recuerdos de Rimbaud y Pascal y está a mitad de camino entre el Boulevard Saint Germain y el delicioso Jardín de Luxemburgo. Allí se celebran lecturas poéticas, presentaciones de libros y exposiciones de pintura. Un rincón exquisito del literario barrio de Odeón. Allí escuché que los políticos deben dedicarse a dar realidad a lo que se dice y se escribe en la sociedad, por eso el filósofo Habermás aseguraba que la tarea de los pensadores y poetas debe consistir en crear opinión pública.

En carta escrita con pluma habla de poesía, que asegura es una terapia para tiempos actuales. Me dedica su último libro de poemas.

“El acto de escribir es un retorno a las fuentes originales, al paraíso perdido, a las raíces de la memoria. Es intentar mediante la palabra y su musicalidad, encontrar el ritmo de una cercanía con los hombres. Descifrar el pasado y edificar el futuro”.

“La poesía es el remanso que eleva el alma, refuerza el espíritu y siembra para que germine una humanidad más verdadera, más honesta”.

“Es querer alertar un poco a “los esclavos” que nunca dejan de bailar ciegamente camino del acantilado. Es una mano tendida sobre frutos de esperanza para hombres y mujeres de todas razas, religiones e identidades”.

“Es un himno como la música, como todas las artes, una pradera sin límites, un gran país sin fronteras”.

“La poesía no es solo la escritura, debe ser un acto de vida. Ser poeta es mirar al perfil de la equidad, es anticipar los derechos del hombre, es querer restituir la belleza y describir el polvo de los sueños».

Gracias Michel. Que tus palabras sean trigo que germine. Y que dejen huella en el viento.