Un año de andalan.es: seguir haciendo camino
andalan.es ha cumplido un año de publicación. Nuestro primer editorial anunciaba cuales eran nuestros objetivos: “Un grupo de personas vinculadas en su día al periódico “Andalán”, presididas por José Antonio Labordeta, nos hemos animado a utilizar las posibilidades que ofrecen hoy la informática y la telemática para poner en marcha un blog colectivo que pueda incluir artículos, documentos y opiniones sobre temas de interés general, con especial referencia a Aragón”, e invitaba a quienes nos leyesen a colaborar, enviando sus artículos.
Un año después, andalan.es ha publicado quinientos artículos, de los cuales los escritos por quienes lanzamos ese proyecto constituyen sólo una pequeña parte. En ese tiempo, quienes nos han leído han visto en total más de 230.000 páginas, con un promedio de 600 páginas diarias y 1.500 visitas semanales. Por desgracia, el día con mayor número de visitas fue el lunes 20 de septiembre, día en el que escribíamos acerca de la marcha de nuestro compañero José Antonio Labordeta, mas de 1.000 personas visitaron la web y numerosas personas plasmaron en forma de comentario sus sentimientos de tristeza en el que ha sido el artículo mas leído y comentado de este primer año.
Dos son los grandes temas que andalan.es ha tratado en este periodo: la actualidad cultural (exposiciones, actuaciones, conciertos, publicaciones…) y el ámbito social y político (especialmente centrado en nuestra realidad más inmediata, pero con incursiones en la realidad del mundo que nos rodea). En todo momento, hemos cumplido el objetivo que nos fijamos, aceptando todas las colaboraciones que fuesen inéditas y que mantuviesen el respeto a las personas aunque, a veces, reflejasen opiniones encontradas.
Cuando pensamos en la posibilidad de que los artículos admitiesen comentarios, nuestro objetivo era que sirviesen para establecer un diálogo constante entre quienes nos leyesen y los autores. Sin embargo, aunque el número de personas dadas de alta para poder publicar comentarios crece cada día, el número de los que realmente llegan a utilizar esa posibilidad es muy reducido. Desde aquí animamos a nuestros lectores a utilizar más este procedimiento de comunicación y debate.
También es necesario mejorar la calidad de los artículos. No se trata de limitar la opinión, sino de que esta sea motivada: que aporte datos que permitan la reflexión y que permitan a quienes nos leen formarse su propia opinión (mediante enlaces, o incorporando documentos). Este el próximo reto que queremos abordar.
Para el grupo de personas que pusimos en marcha andalan.es, el balance de este año es positivo y nos anima a continuar. Somos conscientes de que no todo funciona tan bien como hubiésemos deseado, somos pocos y a veces no llegamos a todo lo que nos gustaría. Resucitar “Andalán” en estos tiempos es una empresa arriesgada; nacimos con la idea de dar voz a través de las nuevas tecnologías a todo ese grupo de personas que participaron en un pasado no tan lejano de la antigua revista y al mismo tiempo dar la oportunidad de participar de esa experiencia a las generaciones mas jóvenes. Ninguna de las dos metas ha dado los resultados que nos hubiera gustado, por un lado los mas jóvenes cuentan ahora con multitud de posibilidades de expresarse y divulgar sus ideas e intereses, y por otro lado muchos de los que participaron activamente en el pasado no han encontrado el tiempo, las ganas o quizás, la necesidad de hacerlo a estas alturas de la historia.
Es nuestro deseo agradecer la colaboración de las muchas personas que han colaborado y animado a que este proyecto salga adelante, colaboraciones sin las que hubiera sido imposible hacerlo caminar, desinteresadas y en ocasiones atrevidas, éstas se han constituido en el principal activo de nuestro proyecto.
Y así, con estas reflexiones, publicamos nuestro articulo número 500 y cumplimos nuestro primer año de andadura digital con ilusión, dispuestos a continuar brindando la oportunidad de participar a quien lo desee, mejorar en la medida de lo posible los errores cometidos hasta ahora y sobre todo, seguir haciendo camino.