Andalán nació hace 40 años
La presentación fue el 16 de septiembre de 1972, un sábado, para poder reunirnos muchas gente en Aínsa, evocando orígenes aragoneses lejanos y recuperaciones (habla, folklore, historia y arte) iniciadas allí por Ánchel Conte. Como siempre al frente Labordeta, de cuya tan llorada muerte se cumplirán ya dos años en unos días, y con él muchos del grupo editor, e ilusionados amigos.
El número 1 de aquel extraño y humilde periódico quincenal iniciaba una historia que duró casi quince años de persecuciones y ensueños, entusiasmos y desventuras, intentando que Aragón recuperase sus señas, tan ricas, y tomase las riendas de un futuro a punto de escribirse. Me ha tocado muchas veces cargar con glorias de todo un colectivo de grandes valores, profesionales y humanos, y a todos la gran honra de ver hechos realidad muchos de nuestros presupuestos, luchas, proyectos.
El que, sin necesidad de citar la procedencia, asuntos que entonces nos hicieron sufrir “secuestros” policiales, castigos económicos, cuarentenas sociales, sean hoy del común, hayan alcanzado rango de normalidad anónima, leyes o usos, es lo mejor que podía habernos ocurrido. Hay democracia, aunque en regulares condiciones; hay libertades, aunque tras años de crecimiento y hasta esplendor, la crisis atenaza a muchísimas personas; ha habido un gran progreso social en sanidad, educación, seguridades, aunque todo parece tambalearse. Quizá no sea inútil recordar a los más jóvenes que en esta tierra, en un momento dado, se supo desempolvar sus valores y avanzar como colectivo. ¿Por qué no habría de volver a hacerse en estos tiempos de enormes dificultades?