El Bar Texas del Tubo zaragozano
“Eres consciente de tu papel de testigo mudo del desmoronamiento de un emblema, de una forma de entender la vida. Tanto es así, que tienes la sensación de que el Tubo se va de puntillas y sin hacer ruido, para así dejarnos la completa libertad de imaginarnos como hubiese sido. Imaginarlo porque ya … solo queda la leyenda.”
Miguel Lizana. El Tubo. Memoria de un abandono.
Este párrafo en el inicio del magnífico libro de Miguel Lizana y Antonio Tausiet es toda una declaración de intenciones y no podemos más que corroborarla y hacer nuestra pequeña aportación para ayudar a no olvidar y a tener para siempre visible ese Tubo de leyenda del que es prácticamente único superviviente el Bar Texas.
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Se podría decir que el Texas es el eslabón que enlaza al Tubo que fue, mítico, simbólico de la ciudad y tantas veces a punto de desaparecer y el Tubo actual y futuro que mantiene el mismo nombre pero que significa otra cosa.
El Texas es el último reducto aferrado al espíritu de papas y calamares y que como guardián del emblemático Tubo da respuesta a los buscadores de esa identidad perdida. Pero también su encomiable permanencia y resistencia da sentido a los nuevos clientes del Tubo “moderno” que con frecuencia lo evitan pero que seguro sentirán su desaparición cuando noten que la esencia, el germen de este espacio ya no está.
Por ello queríamos dejar constancia y ofrecer un recuerdo visual y realista del Bar Texas mediante está fotografía panorámica. Para que la evocación sea más intensa hay que seguir disfrutando de las mejores papas bravas, calamares, boquerones albardados y demás especialidades, de la conversación de Juan Lería y Rufi, de esas paredes abigarradas de matrículas americanas y azulejos refraneros. Y así, de este modo mediante la vivencia real y la visualización virtual poder disfrutar y no olvidar un “lugarico” tan histórico.
Lo calificamos de histórico porque mucho ha cambiado la ciudad desde que el Texas abriera en el año 1946, calculen. Allí acudió Juan con 14 años a trabajar al bar de su tío, desde su Munilla (La Rioja) natal. Y ahí sigue orgulloso de su quehacer y de toda su vida enclavada allí viendo y compartiendo las innumerables vidas que han pasado por el bar.
Hay gente que lo puede ver como un enclave pintoresco, reducto de forasteros nostálgicos de su propia visión mítica del Tubo. Pero siempre hay algo más. En la elección del nombre ya fue en cierto modo pionero. Unos familiares argentinos propusieron un nombre americano ya que preveían una presencia americana en España. Y en efecto así fue, desde los acuerdos defensivos de 1953 se concretó la presencia americana en España, Zaragoza y por su puesto en El Tubo y el bar Texas. Ya se fueron y el Bar Texas permanece. Disfruten de él.
Pablo Alfonso Matute
Fotografía 360 realizada por Ramón Salanova Aznar