25/07/2014

Más literatura

La primera y principal de nuestras noticias literarias, la lección de Aurora Egido en su ingreso en la Real Academia de la Lengua. Fue mucho más breve, claro, que el recio volumen de 350 páginas que edita la institución Fernando el Católico, aunque con membrete de la propia Academia. La búsqueda de la inmortalidad en las obras de Baltasar Gracián, que es su título, se convierte así en la summa de lo muchísimo que su autora sabe sobre el gran jesuita; su conclusión primera, que aún vendrán más; su Do de pecho. La introducción levemente autobiográfica, el elogio de su antecesor, José Luis Borau, la brevísima respuesta de su introductor en ese Parnaso, Pere Gimferrer, todo acompaña al corpus central, que desarrolla el tema enunciado.  Y es que Gracián, nos dice, transformó sus obras en una auténtica paideia, de forma que la búsqueda de la inmortalidad se superpone al propio camino de la sabiduría, que fue constante en todos sus tratados”. Lo que, nos explica, con el uso de mil trucos literarios,”no deja de conformar a su vez una metapoética que alcanza tanto a los niveles conceptuales como a los elocutivos”. Albricias, querida amiga, por ese ingreso, este enorme y valioso esfuerzo, que a buen seguro acabarán traduciendo al alemán o aprendiendo español  los muchos seguidores y estudiosos del padre Gracián.

Aurora Egido1-Aurora-Egido

 

Una gran alegría nos produce también el hecho de que la veterana y prestigiosa revista literaria Ínsula haya dedicado su número 810, de junio, a “Miguel Labordeta, poeta del siglo XXI”. De nuevo el apoyo de la Institución Fernando el Católico, que obra estos pequeños milagros. Es un número soberbio, desde el diseño intelectual, obra de José Luis Calvo Carilla, hasta el físico. Al fin, nuestro mayor poeta del pasado siglo, ve reconocida su figura y su obra. Escriben, con respeto que lleva al rigor, una pléyade de excelentes estudiosos, desde el inicial estudio del citado Calvo Carilla, a los Pérez Lasheras y Saldaña, Ortíz Osés, Rubio Jiménez, Serrano Asenjo, Romo, Emilio Gastón, Matilde Cantín y varios más. Un ejemplar a guardar cerca y repasar pronto.

2, Ínsula 810, Miguel Labordeta

 

En La mirada del esparvel (Instituto de Estudios Altoaragoneses) recoge Ángela Abós artículos suyos entre 1982 y 2012. Treinta años, los más fructíferos también en política, en dirección social y universitaria, de esa gran dama de la cultura aragonesa. La conocí de joven catedrática de Instituto, en veladas inolvidables en Jaca, y he seguido esa trayectoria, esa gran madurez, esa extraordinaria sensibilidad, hasta la actualidad, incluida su preciosa novela autobiográfica. La reconozco en tantos escritos, algunos conocidos, otros escapados, todos ellos precisos, cuidados, sentidos. Como escribe Antón Castro en el prólogo, “este es un libro de alguien con raíces: en la cultura, en los libros, en la educación, en el debate ciudadano… por su intensa biografía, por la asimilación de una cultura rica y matizada, por su pasión por la política y la democracia, por su sentido de la amistad…”

3, Libro de Ángela Abós

 

Pedro Saz Pérez es un turolense nacido en Valencia, que ha dedicado una buena parte de su vida a recuperar saberes y señas sobre la Sierra de Albarracín. Tuve la fortuna de formar parte del tribunal, en aquella ciudad, que juzgó su tesis doctoral. Y ahora me llega un volumen de 600 páginas, primera entrega literaria del Centro de Estudios de la Comunidad de Albarracín, con una novela de tesis y enorme solvencia: El silencio del sabinar. Voy a terminarla en verano, con interés y simpatía. Porque, como se nos dice en la contracubierta, “en esta novela se reflejan las características de la vida cotidiana de un pequeño pueblo de la España rural [Monterde]. Asímismo se irá haciendo patente un drama que llegó a afectar a miles de compatriotas y cuyo destino final era y sigue siendo en muchos casos todavía un misterio”. Es, como otras de su misma envergadura e intención, la historia encarnada en personajes y temas serranos, de la tragedia española que se encendió en guerra civil.

4, Pedro Saz

 

“La lengua aragonesa se encuentra en la encrucijada. Su reto en el siglo XXI es la supervivencia en una sociedad moderna para la que no está preparada. Para ello es imprescindible, además de su reconocimiento oficial y de su nombre histórico, su acceso al sistema educativo, a la administración, a los medios de comunicación y una presencia digna en la vida social y cultural”. Con este lema, se presenta un espléndido Informe, El aragonés en el siglo XXI (Fundación Gaspar Torrente) elaborado por especialistas en diversas áreas de conocimiento. Un tema que debería hacer reflexionar y actuar a nuestra sociedad, ya que no a muchos de nuestros políticos…

5, El aragonés s. XXI

 

Josefina –Pepa- Clavería, una gran experta en historia del arte del dibujo, el cómic, la ilustración en prensa y mil cosas más, acaba de publicar en la editorial Acqua un divertido, asombroso, enigmático libro: Gritos, manifiestos, silencios ocultos en una publicación del Sexenio Revolucionario: El Neo. De la alegoría persuasiva a la propaganda electoral. Un libro de traza humilde pero muy serio estudio y magníficas reproducciones, que analiza y presenta ese apenas conocido periódico oscense de 1868, “una publicación periódica… de raigambre republicano federal [que] contiene símbolos por los que podría estar emparentada con la masonería y unas alegorías que necesitan ser descodificadas”.

6, Pepa Clavería