Aix en Provence es una bella ciudad próxima a Marsella que guarda un sello señorial y conserva bien su historia. Uno de sus hijos ilustres fue Cézanne (1839) y la ciudad cuida su recuerdo. Se pueden visitar los lugares donde nacieron sus obras y los motivos que recogió en sus acuarelas y óleos. La montaña de “Sainte Victoire” fue un tema recurrente. En el museo Granet se conserva una muestra de sus obras. Cezánne mantuvo amistad con Zola y Pissarro. Viajó a Paris con frecuencia. En 1869 conoce a Hortensia Fiquet en la Academia Suiza de París y fue su compañera y esposa. También mantuvo contactos con Monet y Renoir.