Hay que ser de un solo sitio y además de una misma manera
Amberes es una ciudad acogedora y amable que abruma con la belleza de sus iglesias y sus museos. Es la cuarta vez que la visito y la primera que me ha permitido escribir algunas líneas sobre su belleza. Podría ser la capital de Bélgica y de Europa con todo derecho.
Además de sus iglesias he visitado los museos de Knock y Van der Bergh y el Plantin-Moretus, primer museo reconocido como patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, verdadera joya escondida. Me recomendaron un día para iglesias y otro para museos ¡sabio coinsejo!.
Rubens le concede una grandeza singular y la ciudad le recuerda y homenajea en múltiples lugares. Sigue viva su presencia. La sombra de Rubens se desliza por la ciudad.