Bayreuth: lugar de peregrinaje wagneriano (y II). La Villa Wahnfried, el Museo y la tumba de Wagner.
En abril de 1874, Richard Wagner se instaló en Bayreuth con su familia en la casa donde debía pasar los últimos años de su vida, y que no dejó hasta poco antes de su muerte, ocurrida en febrero de 1883 en Venecia. La fascinante personalidad de Wagner la convirtió en lugar de visita y reunión artística y cultural. Allí concluyó “El Crepúsculo de los Dioses” y compuso la mayor parte de “Parsifal”.
La elección por Richard Wagner de la ciudad de Bayreuth como lugar donde erigir su gran Teatro de Ópera (Festspielhaus), dedicado exclusivamente a sus obras, y establecer allí su residencia han determinado que esa ciudad ocupe un puesto relevante entre los aficionados a la música y, en especial, los admiradores del genio de Richard Wagner.
Cuando las temporadas de conciertos concluyen y los grandes teatros de ópera finalizan sus temporadas, diversos Festivales de verano se convierten en el punto de encuentro de los más prestigiosos conjuntos orquestales, directores, solistas y cantantes.