Pedro Segura y Sáez era obispo de Coria cuando en 1922 Alfonso XIII visitó la comarca de Las Hurdes. Su energía impresionó al rey, con quien trabó amistad y que desde entonces no dejaría de favorecerle. En 1927 consiguió que fuese nombrado arzobispo de Burgos y ese mismo año Pío XI le nombró cardenal y arzobispo de Toledo. Así que se entiende fácilmente su oposición a la República, que motivó su expulsión de España en junio de 1931. Poco después se conoció su proyecto de vender bienes eclesiásticos, para enviar el producto al extranjero. Y también se entienden las presiones del gobierno para que el papa nombrase un nuevo cardenal primado, lo que efectivamente hizo.
A mediodía del martes 23 de marzo, ha tenido lugar en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza la ceremonia de investidura de José Antonio Labordeta como Doctor Honoris Causa.