Nuestro gran novelista zaragozano José María Conget ha dado al final del año un aldabonazo de esperanzas. Porque, aun protestando siempre de sus escasos lectores, que sin embargo le tenemos como “de culto”, acaba de publicar (siempre en Pre-Textos, cuidadísima edición), la que, hoy por hoy, me parece su mejor novela, y las hay excelentes.