La reciente presión migratoria sobre Ceuta, promovida por el gobierno marroquí alauita y su rey Mohamed VI, vuelve a pasar a primer plano el injusto trato que la población del Sahara Occidental viene sufriendo.
Hace cien años del Desastre de Annual. Las cartas conservadas han sido fuentes de primera importancia para el estudio de la intrahistoria de los conflictos bélicos, incluido la Guerra de Marruecos. El profesor Carlos Fernández Bañeres nos brinda el comentario de una de ellas, precisamente enviada por su abuelo.
He sido profesor de Historia en determinados institutos en […]
En este trabajo estudiamos la acción del imperialismo europeo en el Norte de África a mediados del siglo XIX. Bucear en esta cuestión puede proporcionarnos algunas claves para entender la posterior evolución de esta zona del mundo, que está viviendo profundos cambios, además de tener una estrecha y compleja relación con Europa.
Palabras clave: África,Argelia,Canal de Suez,Ceuta,Egipto,Eritrea,imperialismo,Marruecos,Napoleón III,Sudán,XIX
Marruecos es un país de grandes atractivos, cuya visita detenida exige mucho tiempo, dada su diversidad. Junto a las cuatro ciudades imperiales (Marrakech, Fez, Meknés y Rabat) hay otras poblaciones como Essaouira, junto al mar, que merecen disfrutar con sosiego sus distintos ambientes, costumbres, tesoros artísticos, sabores y olores.
En las últimas semanas hemos asistido a un movimiento democrático de protesta, que se ha extendido desde Túnez a varios estados del Norte de África y a otros países árabes (Yemen y Jordania). Todos los estados norteafricanos tenían en común la existencias de regímenes formalmente democráticos (pero, en realidad, con prácticas claramente autoritarias) y sus fuertes vínculos con la Unión Europea, para la que eran importantes aliados, al mantener la estabilidad política en la zona, reprimiendo cualquier movimiento islamista y, de paso, también los movimientos democráticos.
Cualquiera podría haber afirmado, hace bien pocos días, que el contencioso del Sáhara Occidental era un conflicto estancado, sin posibilidad de avance alguno. Empantanado entre el cínico mantenimiento de un statu quo ilegal con la complicidad de los organismos internacionales y la reiterada insistencia en un imprescindible acuerdo político, por otra parte inviable, entre dos posiciones radicalmente enfrentadas y, una de ellas, la de Marruecos, contumaz en el desprecio de los principios del derecho internacional y en el sistemático incumplimiento de todo tipo de acuerdos. Hasta algunos analistas y estudiosos consideraban que la verdadera y principal víctima de este proceso, el pueblo saharaui, agotara su voluntad reivindicativa o simplemente desapareciera por la pérdida de su capacidad de resistencia e, incluso, de su identidad colectiva.