El 9 de octubre de 1646, faltándole unos pocos días para cumplir los diecisiete años, moría el heredero de la Monarquía Hispánica, el príncipe Baltasar Carlos de Austria, hijo del rey Felipe IV y de Isabel de Borbón, fallecida justo un año antes. Baltasar Carlos es muy conocido del público en general por el retrato que Velázquez le pintó montado a caballo, y que se conserva en el Museo del Prado.